Actualidad

Jade González: Justicia y Dinero

Jade González: Justicia y Dinero. El 27 de febrero de 2019, en provincia de La Vega República Dominicana, la vida de Jade González, una adolescente de 16 años, se interrumpió trágicamente. En su propio hogar, a las 10:40 de la mañana, Adison Herrera ,su expareja irrumpió con un arma de fuego en manos. Jade sufrió nueve impactos de bala en diferentes partes de su cuerpo, dejándola al borde de la muerte. Su única oportunidad de sobrevivir dependía de la valiente lucha que libró durante 13 días en el Hospital Infantil Regional Doctor Arturo Grullón, en la ciudad de Santiago.

Mientras Jade luchaba por su vida, las autoridades emprendieron la búsqueda intensa de su agresor, quien emprendió la huida luego de cometer los hechas, un individuo con recursos económicos, quien luego se capturó el 7 de mayo de 2019 en Monte Plata. Durante su arresto, se le ocupo una arma de fuego, que luego de ser analizada coincidió con los casquillos y proyectiles encontrados en el cuerpo de la víctima.

Durante el proceso, la magistrada Yamilka De La Cruz, representando al Ministerio Público, llevó a cabo una exhaustiva investigación que incluyó análisis forenses, pericia balística, informes psicológicos y médicos, así como la recopilación de evidencias materiales como el arma del agresor y un teléfono celular. La acusación original se basó en cargos de homicidio agravado con premeditación y asechanza, violencia de género e intrafamiliar, además de violencia sexual, física y psicológica contra una persona menor de edad.

Para ilustrar mejor los hechos, compartimos el trabajo periodístico del programa de televisión “El Informe con Alicia Ortega”.

El Impacto de los Recursos económicos en el Camino de la Verdad, Jade González: Justicia y Dinero.

Durante el proceso, la situación dio un giro desconcertante cuando el juez del segundo juzgado de la Instrucción de La Vega, Martin De La Mota cambió la calificación jurídica a un delito menos grave (art. 310 CPD), que no describe una conducta sino una sanción. Además, durante la investigación se encontró evidencia de que el acusado utilizó su dinero para sobornar testigos y patrocinar sus traslados de una ciudad a otra con el fin de evitar que asistan al juicio y narren lo percibido por sus sentidos durante el sangriento hecho.

Es preocupante que los testigos, quienes son familiares cercanos de Jade, incluyendo a su propia madre, muestren reluctancia para testificar en el juicio. Esta actitud refleja una falta de cohesión social y familiar, así como una fuerte conexión con asuntos materiales, lo cual resulta difícil de comprender pero se ha convertido en una práctica constante.

A pesar de los obstáculos y los esfuerzos del acusado por distorsionar la verdad, el Ministerio Público continuará adelante con determinación para hacer justicia en nombre de Jade, una joven de 16 años que sufrió no solo un trágico final, sino también un pasado marcado por maltrato al ver su niñez truncada por la manipulación de su expareja en el marco de una relación desigual.

La historia de Jade es un conmovedor recordatorio de la importancia de luchar por el honor y la dignidad de aquellos que ya no pueden hacerlo por sí mismos. Su legado perdurará como un llamado a la conciencia social y a la necesidad de mejorar el sistema de justicia penal para proteger a las víctimas de la violencia doméstica y garantizar que la influencia de los recursos económicos no distorsione la búsqueda de justicia.

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *